LA NO-IDENTIFICACION
En respuesta a algunas preguntas que me fueron hechas en la última
disertación, recordaran que se dijo que era una cosa maravillosa experimentar
un instante de no identificación.
Cuando una persona está en tal estado le parece vivir en UN QUIETO LUGAR
CENTRAL dentro de sí misma, aunque perciba que por doquier las cosas se
abalanzan y tratan de apoderarse de ella.
Se asemeja a una multitud mantenida a raya por un policía invisible.
En tal estado se puede descubrir cuál es uno de los principales objetos de
la observación de si.
Estriba en SEPARARSE UNO MISMO DE LO QUE OCURRE DENTRO DEL CORAZÓN Y LA
MENTE que continuamente se apodera de nosotros y de hecho a menudo nos hace
caer.
Todo ello es, visto desde otro ángulo, la "casa en desorden"
dentro de nosotros.
Ahora bien, es posible poner un poco de orden en esa casa.
Por esa razón les hablaré otra vez sobre el significado de la
no-identificación, porque creo que muchos de ustedes han llegado hasta cierto
punto y luego se demoran en comprender lo que es preciso hacer.
Por eso les diré otra vez que cuando traten de observarse a si mismos ES
PRECISO NO PONER EL SENTIMIENTO DE "YO" EN LO QUE SE OBSERVA.
USTED ESTÁ OBSERVANDO “ELLO”, una maquinaria de emociones y pensamientos,
que funciona por si misma y nunca se detiene y, si pone atención, observará un
"Yo" en usted, una persona en usted.
PERO ESA PERSONA NO ES USTED, aunque viva con usted y se alimente de usted,
y tome su nombre —esto es, su fuerza.
LLEGARÁ A UN ESTADO DE COMPLETA CONFUSIÓN si cree que es un "yo"
y que de algún modo ese "yo" puede observar al otro "yo".
La gente se hace LA ILUSIÓN de que sólo una cosa obra y siente y piensa en
ella.
Por haberse hecho esa ilusión, no se pueden imaginar qué significa EL
DOMINIO DE SI.
Si suponemos que una sola cosa obra en un hombre, luego ES IMPOSIBLE QUE
UNA COSA MANDE, Y OTRA OBEDEZCA.
Cuando el Trabajo dice que el Hombre es comparable a una "casa en
desorden", una casa llena de sirvientes que no está controlada por nadie,
da este sentido a lo que dice.
Significa que hay muchas gentes en el Hombre, muchísimas personas, todas
muy diferentes, cuyo amo está ausente, que hablan por el teléfono del amo en su
nombre y hacen lo que les da la gana en la casa que en realidad no les
pertenece sino al amo.
Ahora bien, si observamos una parte de esta casa en desorden y seguimos considerándola
como si fuera uno mismo, se comete un error fundamental en la observación de
si.
Es preciso observar que uno es muchos y no uno.
Les he dicho muy a menudo que esta es una cosa DIFÍCIL de hacer.
Quiero decir, ES DIFÍCIL DE COMPRENDER y también lo es poner en práctica lo
que resulta de tal comprensión.
En este momento ES UNO DE LOS MÁS MARAVILLOSOS DESCUBRIMIENTOS que se
pueden hacer en el Trabajo.
Ahora bien, si uno se identifica con todo cuanto observa NO SERÁ CAPAZ DE
DETENERLO, será siempre un obstáculo en su propio camino, estará siempre
AFERRADO a aquello de lo cual debe separarse.
Escuchen otra vez: si una persona se toma a si misma como uno, le es
imposible separarse de lo que observa en si misma.
"Si mismo" no es una sola cosa, sino que está compuesta de
muchos, muchos síes.
La observación de si es OBSERVAR A ESTOS SÍES que tomamos tan fácilmente
como "Yo mismo".
Ahora bien, la observación de si no debe hacerse con la identificación.
No se debe identificar con la idea de observarse a si mismo.
La gente a veces se identifica mucho con alguna palabra del Trabajo tal
como el "recuerdo de si", "la observación de si", la
"emoción negativa", la "consideración interior", etc.
Esto les impide comprender lo que podrían significar dichos términos.
Si practica la observación de si identificándose completamente con la
ansiedad o una tensión exagerada, esforzándose por hacerlo, el resultado será
nulo.
No podrá hacer nada de este modo.
No se puede hacer nada en un estado de sobre-ansiedad porque uno se sitúa
en seguida en la parte equivocada de los centros.
En realidad trabaja en un estado negativo y el fracaso lo deprime.
La práctica de la observación de si se hace sin mostrarla a los otros y sin
mostrársela a si mismo en cierto modo.
Creo a veces que es como mirar de soslayo, mirar algo —esto es, proseguir
como si no se le prestara mucha atención.
Muchos procesos que tienen lugar en la mente se detienen cuando se intenta
observarlos demasiado directamente.
Esto es especialmente cierto con respecto a la imaginación.
La observación de si requiere UN TOQUE MUY DELICADO porque la maquinaria
con la cual se entra en contacto es muy sensible y delicada.
Por lo demás, es preciso no esperar un resultado inmediato por haberse examinado
a si mismo durante un tiempo comparativamente breve.
En el Trabajo hay una frase que expresa que no se debe trabajar por los
resultados.
Una de las razones que sustenta esta frase es que si se trabaja para lograr
resultados es fácil desengañarse, y la segunda razón es que muchas veces se
obtienen resultados, pero no los resultados que se esperaba.
La observación de si acrecienta gradualmente la luz.
En el Trabajo se compara a veces el estado interior de un hombre con las
tinieblas.
la observación de si deja penetrar un minúsculo rayo de luz.
Ahora bien, muchas cosas dejan de producirse en presencia de la luz.
Esta mera penetración de la luz presenta en una persona las cosas de un
modo muy diferente de lo que esperaba.
Hemos oído decir a veces, y a mi me lo dijeron: "la luz puede
sanarlo".
Ahora comienzo a comprender lo que esto significa.
La práctica de la observación de si deja penetrar gradualmente más y más
luz, de tal modo que cuando se hace retroceder la mirada interior sobre la
propia vida es como si se la viese iluminada, aunque de un modo difuso, por
todos los momentos de observación de si que están sepultados en el pasado.
Ahora bien, el Hombre como máquina trabaja mejor cuando la luz se derrama
sobre él.
El Sr. Ouspensky tenía la costumbre de comparar los centros en el Hombre
con MUY COMPLICADAS MAQUINAS DE EXTRAORDINARIA DELICADEZA QUE EL HOMBRE INTENTA
HACER TRABAJAR EN LA OSCURIDAD.
Cuando permite que penetre LA LUZ en él, cuando tiene una mayor percepción
de sí a lo largo de ciertas líneas definidas, ve mejor su máquina.
Sabe emplearla mejor y VE LAS CONEXIONES EQUIVOCADAS y los errores que
cometió cuando la hacia trabajar en la oscuridad.
Ahora bien, LA LUZ que un hombre deja penetrar por medio de la observación
de si le permite distinguir SU MEDIO AMBIENTE INTERIOR, porque, como dije a
menudo, vivimos en DOS ÁMBITOS, uno que nos es revelado mediante los sentidos
externos que contiene a muchas gentes, algunas buenas y otras malas, y el
segundo, EL ÁMBITO INTERIOR que contiene asimismo a muchas gentes tanto buenas
como malas.
Este segundo ámbito en el que vivimos a oscuras no lo conocemos en
absoluto.
Por eso lo tomamos como si fuera nosotros mismos.
Pero por medio de la observación de si entra la luz y esta luz EMPIEZA A
SEPARAMOS.
LA ENSEÑANZA ESOTÉRICA ES LA LUZ, pero solo cuando se la comprende, se la
valora y se la aplica.
ES IMPOSIBLE LOGRAR LA LUZ SI NO SE LA VALORA.
No se puede hacer uso de la enseñanza esotérica simplemente por razones
personales o para mejorar la memoria o para un fin semejante.
La luz hace que muchas de las ideas del Trabajo se aclaren.
No podemos comprender LAS IDEAS DEL TRABAJO a no ser que trabajemos sobre
nosotros mismos.
Esto se debe a que LA COMPRENSIÓN es el resultado de un desarrollo del
conocimiento y de un desarrollo del ser.
Ahora bien, el ser no cambia si está completamente identificado consigo
mismo.
Entonces no hay luz.
Está en un estado de oscuridad.
NO PUEDE VER QUE NO TIENE UN SOLO 'YO' EN SI.
Cree que todo es "yo mismo".
No hay luz porque está identificado consigo mismo.
Luego no puede producir ningún cambio de ser.
Y SI NO HAY CAMBIO DE SER, TAMPOCO SE PRODUCIRÁ UN CAMBIO EN SU COMPRENSIÓN
DEL TRABAJO.
Podrá recibir el Trabajo como conocimiento pero no lo comprenderá.
No será capaz de ver en El Trabajo cosa alguna.
Y esto se debe a la falta de luz.
Cuando usted empiece a observarse a si mismo, a tener vislumbres de si
mismo, a notar lo que sucede en usted, comenzará a SEPARAR A USTED MISMO DE SÍ
MISMO.
Esto deja penetrar la luz.
La observación de si deja entrar un rayo de luz.
Esta luz es llamada en el Trabajo la CONCIENCIA MENTAL.
El objeto que se propone el Trabajo es acrecentar la Conciencia mental.
Hacemos lo que hacemos porque no somos apropiadamente conscientes.
Somos la gente que vive en las tinieblas mencionada en los Evangelios.
Una de las ideas fundamentales de esta enseñanza es que toda la humanidad
está dormida y por eso suceden en la Tierra cosas tan horribles.
¿Cuál es la verdadera razón de todo ello?
La verdadera razón radica en la ausencia de Conciencia mental.
Si el Hombre pudiera despertar, si llegara a ser más consciente, todo
cambiaría.
Primero, sin embargo, debe despertar para sí mismo; su conciencia de si, su
percepción de si se acrecentaran enormemente.
Ahora bien, si se toma a sí mismo como una sola persona, esto es imposible.
Seguirá siendo ciego a las muchas cosas diferentes que siempre hay en él.
Hablando sobre la identificación, el Sr. Gurdjeff dijo que era uno de los
mayores males, una de las enfermedades más terribles, y que ante todo un hombre
debe luchar contra la identificación consigo mismo.
El ser humano, dijo, posee toda clase de ILUSIONES, toda clase de IMÁGENES
DE SI MISMO, y con estas ilusiones e imágenes está identificado.
SE CREE una sola persona, que tiene voluntad y plena conciencia. Esto es
identificarse consigo mismo.
Es una de sus formas.
Ahora bien, quizá sepa que no sea así pero en realidad seguirá obrando y
comportándose "como si tuviera voluntad y plena conciencia.
Esto se debe a que el conocimiento aún no ha penetrado y está simplemente
en la mente como conocimiento.
Es sabido que la primera forma de recuerdo de si es la comprensión de la
propia mecanicidad.
Esto es comprender directamente que no se tiene una voluntad, sino muchas
voluntades, y no se tiene verdadera conciencia, sino muchas conciencias
intermitentes y pequeñas.
Ahora bien, las gentes dicen que se observan a si mismas y llegan a cierto
punto, y luego les es imposible proseguir y se alejan de lo que han visto.
Si esta observación de si es genuina, hallarán que son llevadas otra vez al
punto por algún otro camino.
Por otra parte, si no es genuina, si es meramente una ligera dramatización
de si, en ese punto mismo caerán en el sueño.
Según mi parecer la enseñanza general de las influencias del Trabajo que
obran sobre usted, una vez que ha empezado a trabajar sinceramente, siempre lo
guiarán si no interfiere demasiado creyendo saber lo que más le conviene.
Ahora les diré algo cuya importancia es considerable; hablo otra vez a
quienes desean trabajar sinceramente.
Cada mañana, o al menos cada día, es preciso que se pongan deliberadamente BAJO
LA INFLUENCIA DEL TRABAJO.
En nosotros hay estados de Trabajo y estados de vida.
Ahora bien, si está en un estado de Trabajo, está, por así decirlo,
protegido contra una cantidad de estados desagradables en los que de otro modo
hubiera podido caer fácilmente.
A veces, cuando uno está en el estado de Trabajo alcanza momentáneamente la
posición central sobre la cual hablé, y se tiene la maravillosa experiencia de NO
ESTAR IDENTIFICADO por un momento.
Es preciso que cada uno se ponga, dije, todos los días en estado de
Trabajo.
Para hacerlo es preciso que encuentre la manera que más convenga a su
propio caso.
Hay, por ejemplo, el recuerdo de su propósito y al mismo tiempo la
tentativa de recordarse a si mismo.
En su mente se repite siempre algo que ha oído y leído en relación con el
Trabajo.
Tiene siempre presente el día anterior o el recuerdo de que tiene que ser
más consciente en relación con otra persona, y sobre todo, EL SENTIMIENTO DE
ESTAR EN PRESENCIA DEL TRABAJO Y VER LAS COSAS A LA LUZ DEL TRABAJO.
Esto es una gran ayuda —de hecho, ayuda hasta un grado incalculable.
Pero depende de la calidad del esfuerzo.
Si no se da nada, nada se puede esperar.
Maurice Nicoll